sábado, 15 de septiembre de 2007

Delicadeza retorcida



La muerte se refresca; un helado se derrite; conejos de Pascua y extraños botes. Frutas antropomórficas, algunas tristes y otras amenazantes. Y una particular obsesión por las insignias, banderines, antiguallas y los idiomas. También el caprichoso Fred (sigue, con su juego propio, acá). La pintora e ilustradora holandesa Femke Hiemstra además vende los pins más hermosos imaginables.