miércoles, 4 de julio de 2007

Vivir su vida


Se escapó de su casa para estudiar arte, y también para huir del fantasma de su hermana suicida. Y entre 1979 y 1986, cuando vivía en el Bowery llevó un diario visual de su vida y de la de sus amigos. Su rostro desfigurado tras los golpes de su novio. Ella en la cama, mirando a su pareja llena de deseo, decepción y miedo. También amor. Drogas, enfermedad, fiestas, chicas, chicos, amantes. La hermosa Cookie Mueller. La celebración que terminaría en un amanecer de brillantina barata y resaca y dolor. Para 1990, la mayoría de los retratados estaban muertos. Nan Goldin, la más valiente.