lunes, 29 de septiembre de 2008

Talismanes y santitos


Parecen objetos encontrados, devociones abandonadas, y algunas partes de ellos en efecto lo son. Pero se le agrega vidrio para nada cristalino --que a veces revela vidas interiores-- y cerámica y otros detalles a la madera original, por ejemplo, y se consigue esta ofrenda votiva que, como no está dedicada a nada real, es una reliquia fantasma. Niños, sirenas, animales, mujeres sufrientes. La tristeza de las esculturas bellas y brutales de Christina Bothwell.

domingo, 14 de septiembre de 2008

La iconoclasta


Es italiana, vive y trabajo en Trento. Nació en 1980, y se podría decir que su hogar artístico es el cómic. Pero con los años, expandió su fascinación hacia todos lados de la cultura pop: los superhéroes, los músicos, los artistas --a quienes suele dibujar degradados y destrozados, porque se nota que a ella le gusta mucho abrir cabezas y cuerpos y mostrar cerebros destrozados y tripas desperdigadas. También trabaja la infección, los post it, la repetición. La incansable Laurina Paperina.

domingo, 7 de septiembre de 2008

Barroco de los Balcanes


Su abuelo fue declarado santo por la Iglesia Ortodoxa Serbia después de muerto, y ahora está embalsamado y es adorado en el templo de San Sava. Su padre y su madre fueron partisanos en la segunda guerra mundial. "Mi madre tenía un control militar sobre mi y mi hermano", contó. "No me dejaba salir de la casa después de las 10 de la noche hasta que tuve 29 años. Todas las perfomances que hice en Yugoslavia fueron antes de las 10 porque tenía que volver a casa. Una locura. Todo ese cortarme, quemarme, darme latigazos, casi perder la vida dentro de la estrella de fuego, todo se hizo antes de las 10 de la noche". También limpió huesos, tomó pastillas para la catatonia y se desmayó por falta de oxígeno compartiendo el aire con su compañero de vida y arte, Ulay. Marina Abramovic, la abuela del perfomance art.